“Mientras mi mente siga creando, mis manos intentarán hacerlo visible, siempre”, es la frase que intenta explicar la vocación y la pasión que Leila plasma en cada una de sus piezas. A través del lenguaje del Realismo Mágico, la artista expresa sus ideas conformando así una extensa y variada colección de pinturas.

“Me pedían que comenzara a pintar y venderles mis cuadros, les gustaba lo que hacía, y después, también, querían que de clases. Al no tener un título de formación universitaria no me animaba mucho, pero aun así me animaban a transmitir mis conocimientos” explica la artista al hacer una mirada retrospectiva y recordar sus comienzos. 

Se define como autodidacta, en constante formación, apasionada por su profesión, la cual disfruta plenamente porque en ella encontró una fuerte vocación. Desde hace 10 años la pintora experimenta en diversos materiales, con los cuales crea extraordinarias obras innovadores, plasmando en ellas toda su creatividad, a la que ejercita diariamente, “mis ideas surgen luego de pensar, investigar e informarme, no es algo que se dé de un momento a otro, sino que debe ejercitarse” cuenta Leila al explicar cómo es su proceso creativo.

“Muchas personas se acercan buscando que pinte algo para ellos, entonces les aclaro que no copio ni repito cuadros ni ideas. Todas las obras son creaciones propias, elijo que ninguna se haga de manera repetida, porque en cada una de ellas, intento integrar mi creatividad con las expectativas que la persona quiere en su cuadro. Es la combinación de ambas lo que hace que cada cuadro sea personalizado, pensado desde la primera mancha para un lugar especial”, profundiza de su relación con sus seguidores. 

“Realizo obras de todos los tamaños, y de muchos estilos. Sólo necesito que me cuenten, y me dejen crear”, finaliza Leila, que tras una década de trayectoria logró una experiencia artística y creativa que puede observarse en sus cautivantes e increíbles obras, las cuales pueden encontrar en sus redes sociales (@leilaverbeke @cuadrosdeleila).